Las estrellas no están en el cielo, están en la tierra, están en el corazón de cada uno… en aquello que ya fue y que dejó un brillo intenso en lo profundo del alma. Estan en ese resplandor que queda tatuado para siempre.
Las estrellas no están en el cielo, están en la tierra, están en el corazón de cada uno… en aquello que ya fue y que dejó un brillo intenso en lo profundo del alma. Estan en ese resplandor que queda tatuado para siempre.